Arrastrar

Su rostro arrancaba más sufrimiento del que podía soportar.

Sin su mejor amigo ¿Cómo habría de mirar nuevamente la playa?

Sin su cómplice ¿cómo habría de tramar un nuevo plan?

Sin su alma gemela, tomar un postre no tenía ya ningún sentido.

Hay seres que se convierten en nuestra segunda pierna, sin quienes ya no quieres ni esperas poder volver a caminar. 

Se dejó caer recargado sobre la pared hasta llegar al piso. Lloró hacia dentro, sin lágrimas, sin hacer ruidos, sin soportarse a sí mismo, sin poder esperar ya nada más del mundo.

¿Cómo sobre ponerse? Estaba plenamente convencido de jamás habría de sonreír de nuevo. Demasiado tarde para ser feliz otra vez. Sin razones para levantarse, sin fuerzas para sostenerse, sin ánimos para soportarse.

                                    o O o

Desearía no haberme marchado tan pronto. Marchándome terminé con más de una vida. Dejé pedazos por todos lados, pedazos vivos y muertos.

Pero ya es muy tarde para arrepentirse. 

Ya es muy tarde para tratar de dormir. 

Pero ya estoy tan muerto como para arrepentirme de no querer vivir.

Seguiré arrastrando los pies sobre los recuerdos de lo que fuimos, seguiré arrastrándome sobre los pedazos que dejamos y que algún día simplemente desaparecerán.